sábado, 27 de marzo de 2010

Un poema familiar

Un poema me he soñado,
Y en él una familia he encontrado,
¡Y he dicho! De un misterio,
¡Que a muchos ha intrigado!

Su enredadera me ha de proteger,
Como la madre que jamás ha de padecer,
Una figura humana, intriga me ha dado,
Que con su fuerza me ha cuidado.

Mi poema se ha agrietado,
Como la fachada, que el tiempo le ha pasado,
Mas la estructura no ha de ceder,
Como la familia solida, se ha de mantener.

dedicatoria: Un poema escrito por el dibujo que yo he hecho, pero la inspiración real me llego por la gran familia que me ha tocado, para todos ustedes mi familia se los dedico

viernes, 26 de marzo de 2010

La segunda vez que te vi, y la primera vez que te mire.

Por azar del destino, o la simple estrategia, que mas me convino,
Te volví a ver y volví a presenciar tu sonrisa, mientras mi ego, subía,
Siguiendo yo mi ritmo, al estilo y juego de quien no le interesan las consecuencias, acercándonos te fui conociendo,
Analizando cada gesto y detalle como quien planea su jugada con la mas meticulosa estratega,
Y mientras la conversación se daba comprendí la profundidad de tus ojos, para mi gran sorpresa,
Como cuando miras la profundidad del sol saliendo al alba.

No puedo llamarlo destino,
Ya que en eso no creo y nunca he creído,
Más a lo que sí puedo apostar y creer es en la magia de aquel pueblo y camino,
Y eso es lo que aquella noche llamaste destino.

He sentido últimamente la infinita curiosidad de saber cómo fue que en aquella velada, todo se acomodaba,
La gente, el camino, la situación tan esporádica y por demás mágica,
Hay quienes me han nombrado dichosa, o han comentado que suertuda que eres, otros comentan es el destino, pero todos terminan callando, cuando yo afirmo, fe magia la que tuvimos,
Magia por el lugar, la compañía, la naturaleza,
Y qué más da, es solo por eso que digo que aquella velada mágica,
En donde hasta las estrellas se confabularon con la situación, mostrando su fugaz faz,
Que he dicho, en esos momentos… fue la segunda vez que te vi, y la primera vez que te mire.

Mi amor en las 4 estaciones

Anhelo verte, y contemplar tú siempre increíble belleza, que atrapa mi atención,
Y ya quiero sentir tus manos en las mías,
Mientras en mi mente te digo lo mucho que te amo,
Escuchar tu siempre viva voz,
Ver tus cabellos traviesos jugando con el viento, mientas miras fijamente a la nada,
Con esa forma tan peculiar por demás, con la que miras,
Como seduciendo a la vida mientras ella te seduce a ti.

La increíble vanagloria que presentas, cuando mis ojos admiran tu belleza,
Como flechazos cupidescos que me atrapan y enamoran.

Mi eremita amor, que apenas florea con tu llegada, como la primavera,
Que a su inicio despierta la flora y fauna de mi bosque corazón.

Con el primer contacto físico y verbal,
Despiertas mi pación más carnal,
Al igual que el varano, que me empieza a calentar,
Calor de mi hogar de amor, con esa, mi lujuriosa y desmedida pación.

Frio que por mi puerta carnal, adentrándose a su paso, como el fin de mi día que ha de llegar;
La esperanza de encontrar tu amor el día de hoy,
Como hojas secas que el otoño arrebato de mi corazón,
Cayéndose mí roble ilusión,
Así es como me siento con el final yo poder avistar.

Y triste, que tristeza al tu partida mirar, contemplando el final,
Una fuerte helada invernal,
Que mata y duerme a la más linda flor, y noble animal,
Mi enorme amor, que como un paro al corazón, queda roto con tu desaparición.

Y da igual, no me preocupo,
Por que se que al día siguiente,
Como el ciclo presente,
Tu llegada podre admirar,
Como la primavera que ha de regresar.